Cada noche, cuerpos sin nombre llegan a la sala de autopsias de la Dra. Cristina Cattaneo. Ella los llama los "sconosciuti puri" (puros desconocidos) y suelen pertenecer a los márgenes de la sociedad. Son personas sin hogar, trabajadores sexuales, adolescentes fugitivos. Últimamente, la mayoría han sido personas migrantes rechazadas por el mar Mediterráneo en las costas de Italia. ¿Qué sucede cuando los muertos han perdido su identidad? Ante esta creciente multitud, nadie parece preocuparse por su derecho a la dignidad. Nadie excepto Cristina.