One Degree Matters rastrea el impacto que genera el aumento en la temperatura, midiendo el derretimiento de los casquetes de Groenlandia en el Océano Ártico. El título de la película proviene del hecho de que cada grado es de gran importancia, ya que hemos alcanzado el límite de cambio climático observado en los últimos 10 mil años, en los cuales se ha desarrollado la civilización actual.