Una joven pareja viaja a Transilvania para visitar el castillo del abuelo de ella. El abuelo no es otro que Vlad Tepes, el Conde Drácula, descendiente directo de Vlad el Empalador. Por el camino encontrarán chicas desangradas, lobos que aúllan y un cura que es mordido por dos bellas vampiresas. Cuando, por fin, la pareja llega al castillo se encuentra con una galería de grotescos e inquietantes personajes.