A David Beckham el fútbol le ha dado todo, ahora que su carrera profesional ha terminado quiere devolver algo a la sociedad. Ligado a su colaboración con Unicef quiere demostrar el poder del fútbol para unir a gente de todo el mundo y como factor para cambiar la vida de muchas personas. Para ello se plantea un nuevo reto que muestra diferentes realidades sociales que comparten la pasión por el fútbol: viaja alrededor del mundo para convertirse en la primera persona que juega un partido de fútbol en todos los continentes.