Sara está casada con Daddy Mannion, uno de los hombres más poderosos de Dromord y patriarca de su familia. Su gran amor es, no obstante, su hijo Doggy Manion, un recluso que vive en las montañas que rodean su pueblo. También siente estima por Martin Mannion, el hermano pequeño, un granjero de pollos de poca monta. Con todos ellos, Sara guarda algún tipo de vínculo que, en cierto momento, acaba destapándose como fatal para el futuro de una familia que ni se imagina lo que está a punto de vivir.