La película ofrece una visión compleja y matizada de la vida cotidiana en la pequeña localidad agrícola de Monrovia, Indiana, y proporciona una cierta comprensión de una forma de vida rural del medio oeste americano, que siempre ha sido importante en América pero cuya influencia y fuerza no siempre han sido reconocidas o entendidas en las grandes ciudades de las costas este y oeste.