Era mayo del 38, en plena Guerra Civil. Los habitantes de Benassal, Albocàsser, Ares del Maestrat y Vilar de Canes, en Castellón, jamás supieron a ciencia cierta quién o quiénes pilotaban los aviones responsables de aquella atrocidad, aunque la propaganda rebelde lo atribuyó a los republicanos. Ahora, 80 años después, «Experimento Stuka» cuenta lo que realmente ocurrió entonces, donde el balance final fue de 38 muertos y cuatro pueblo derruidos.