Este reportaje especial revela la historia, la política extrema y los rígidos estándares sociales que han creado un legado de opresión interna y agresión externa. Como el pueblo norcoreano sufrió hambrunas, campos de trabajo forzado y ejecuciones públicas, el régimen de los Kim pasó tres generaciones persiguiendo implacablemente ambiciones nucleares. Operan como un sindicato criminal, utilizando dinero falso, drogas y ciberespionaje para financiar su máquina de guerra. Ahora, con armas que rivalizan con las superpotencias del mundo, su retórica agresiva ha llevado al mundo a un punto de crisis.