La madre viuda Holly se pone a prueba radicalmente cuando su hija adolescente Betsey experimenta una profunda iluminación e insiste en que su cuerpo ya no es suyo, sino que está al servicio de un poder superior. Atada a su nueva fe, Betsey se niega a comer pero no pierde peso. En un dilema angustioso, dividida entre el amor y el miedo, Holly se ve obligada a enfrentarse a los límites de sus propias creencias.