En las tierras altas y rocosas de Jordania y en los brillantes desiertos de Arabia Saudí se encuentran los restos de dos ciudades asombrosas: Petra y Hegra. Un pueblo conocido como los nabateos las construyó hace dos mil años, tallando asombrosas tumbas, templos y santuarios en la propia roca. Gran parte de la historia de los nabateos ha desaparecido de la historia. Pero estas tumbas y templos guardan profundos secretos sobre su modo de vida. Las inscripciones antiguas y los nuevos descubrimientos sugieren que las mujeres ejercían un poder sin igual en el reino perdido de los nabateos.