Lucía se lanza a participar en una sesión de terapia con ayahuasca buscando claridad ante los dilemas personales que la atormentan. Fer se entera de la complicada situación patrimonial de su padre. Óscar descubre el lugar en el que se esconde Haro y, aprovechando que el aristócrata sigue dando rienda suelta a sus peores deseos, emprende un acecho letal sobre él.