Agosto 1986. Gabriel tenía todo listo con sus compañeros para regresar a Santiago, hasta que fueron sorprendidos por unos desconocidos quienes los amarraron. En el colegio, Félix y sus amigos comenzaron a ver revistas de Playboy a escondidas y bromearon que así aprenderían biología y anatomía. En la fábrica, Juan le contó a don Farid que no estaba su chequera y él aseguró que esto era gravísimo porque tenía talonarios firmados y cheques en blanco. En una cafetería, Claudia esperó a su mamá muy nerviosa para conversar con ella. Pero, Ana la miró a lo lejos y no se acercó. En la productora, Martín vio el material de un arsenal de armas que se había encontrado en una playa del norte del país. Claudia, a su vez, se enteró de esta noticia por la TV y se preocupó de inmediato por Gabriel. Pedro, por otro lado, llegó hasta las oficinas de la CNI y aseguró que respecto a su “hermano” todo estaba bien y solo era cuestión de tiempo porque el hombre estaba “agarrando confianza”.