Helen y las demás deciden seguir a Clare para impedir que sobrepase sus límites y se convierta en un Kakuseisha. Además, Miria explica que Clare no es medio Yoma ya que ella lleva en su interior la sangre y la carne de Teresa. Mientras, Priscilla continúa con su venganza por la muerte de sus padres y logra transformarse completamente como Kakuseisha. Clare, al ver que no tiene el suficiente poder para vencerla, decide volverse más fuerte.