La acción transcurre en un centro de servicios sociales por donde desfilan un sinfín de personajes que han perdido su rumbo vital. Raquel, una joven divorciada, teórica del trabajo social y que ejercía de funcionaria en Bruselas, solicita el traslado y regresa a España. Gracias a un enchufe, es contratada por el centro social, que está dirigido por una treintañera también llamada Raquel, pero que prefiere que la llamen Quela.